Terapias alternativas en medicina veterinaria en el Uruguay
En diciembre del 2025 se cumple un año de la primera nota al Colegio de Veterinarios del Uruguay (CVU) dirigida a su presidente para hacerle notar de un error cometido en el Decreto que reglamenta la Ley de creación del Colegio que nos agrupa.
En dichas notas se pide que se estudie el ítem 16 del reglamento que le da a los veterinarios la potestad exclusiva como profesionales de practicar la homeopatía y nos asigna la tarea de supervisar las terapias alternativas.
En un año no he recibido comunicación formal de dicha institución y no se han contestado las notas en las que se agregan contexto, motivos y abundante bibliografía y referencias que apoyan la argumentación para corregir ese error que además considero que está idea es representativa de la opinión de la enorme mayoría de los profesionales que se dedican a la medicina y a la producción pero asentados en la evidencia y no en la fantasía.
Han sido cuatro cartas al Colegio y tres a la Academia de Ciencias Veterinarias y ambas instituciones que además comparten integrantes, están al tanto una de otra de todos estos materiales que he adjuntado; repito que en total fueron siete cartas.
Los veterinarios del Uruguay están especialmente autorizados al ejercicio de la homeopatía y a la supervisión de las terapias alternativas, todas, sí, cualquiera sea la que un colega extraviado se le ocurra. Un colega que trabaja fuera del camino de la Medicina basada en la evidencia.
Lo declara el mismo reglamento del CVU.
Homeopatía, Energía piramidal, Biodecodificación, Terapia neural, curación con Agua de mar, Sanación con Dióxido de cloro, Astrología veterinaria, terapia con Ozono intrarectal, Iridología, vale todo y el Colegio aprueba.
Decreto N° 389/018, Reglamentación del Colegio de nuestra profesión en el Uruguay, ítem número 16, artículo 13, del capítulo IV de la Ley N° 19.258, que refiere a las actividades que son competencias exclusivas del Profesional Veterinario Colegiado:
«La medicina veterinaria no convencional, como la homeopatía, acupuntura, fitoterapia; la supervisión de las terapias alternativas».
¡Avalados por ley!
En este limbo de conceptos sin explicación y sin una ampliación del sentido estricto del término «supervisión», no se explica lo que significa esta tarea en el contexto de nuestro trabajo, pero queda claro que ponemos nuestro título universitario para dar aval a alguien que practica una terapia alternativa.
Sea alguien de nuestro equipo u otro colega al que derivamos o consultamos y que se dedica a estos menesteres o a un fulano que no es veterinario que le haga reiki o terapia con cuarzos o cualquier otra de estas disciplinas; nosotros supervisamos.
Es una vergüenza que los legisladores hayan aprobado un texto en estas condiciones.
Podemos especular que no había nadie que se dedique a la medicina veterinaria o la producción animal en el contexto de la aprobación del decreto para que frenara esta monstruosidad, pero la explicación es otra.
En realidad, no podemos negar que esta aberrante condición que se nos asigna, no es que no fue detectada por los colegas del ministerio (MGAP), del DILAVE, de la Sociedad de Medicina Veterinaria del Uruguay (SMVU), de la Sociedad de veterinarios especialistas en pequeños animales (SUVEPA), de la Academia, del mismo Colegio(CVU) que solicita el reglamento y la propia Universidad de la República (UdelaR), si es que todas estas instituciones han sido consultadas por el tema, sino que estuvieron de acuerdo y fue seguramente pedido que estuviera allí ese ítem para habilitar sutilmente a las personas que practican estás actividades, con la opinión de que si mal no hacen, es mejor que sea un veterinario que haga el trabajo de inspeccionar, observar, comprobar, examinar, revisar, controlar, vigilar las terapias alternativas con sus pacientes.
Estos son los sinónimos de supervisar (RAE).
La misma Universidad presta sus instalaciones a los homeópatas para que den charlas y cursos opcionales y brinda de esta manera apoyo directo para la promoción de una de estas pseudociencias en lugar de la función de formación científica sería y crítica de los nuevos profesionales. Gran ejemplo.
Esto es mucho más que supervisar, aunque está claro que este disparate no está dentro de la planilla de formación curricular.
El mismo CVU tiene como función la recepción de denuncias de las actividades que en el marco del ejercicio de nuestra profesión se apartan de lo que está científicamente comprobado.
Llama la atención que existe un Código de ética que entonces ni el mismo Colegio lo cumple porque les da cobijo y amparo a quienes las practican.
Son unos fenómenos, la responsabilidad de la profesión frente a la sociedad con este ítem queda rotundamente clara y transparente o porqué no decirlo, ausente por completo, invisible.
Un veterinario que supervisa terapias alternativas es un irresponsable y un delirante que introduce pensamiento mágico en el ejercicio profesional y esto es inaceptable.
Es un escándalo que no hayan tomado conciencia del grosero error que significa el ítem 16 y las autoridades del CVU aún no han iniciado los trámites para corregirlo, ni las autoridades pasadas (2024) ni las actuales (2025) y ambas se conjugan.
Un enroque de representantes y todo sigue igual en este punto.
Triste y lamentable para la profesión.
Imaginemos una crisis sanitaria en el país en animales de producción, una enfermedad infecciosa contagiosa que afecta seriamente a los enfermos y paraliza la industria y el comercio y los profesionales a cargo introducen en sus decisiones una porción este pensamiento mágico, sería un desastre, una calamidad, entonces, ¿porqué darle aprobación y el permiso para aplicarlo en la privacidad de los consultorios?
¿Quién controla a estos veterinarios supervisores?
¿Cuál es la vara de medida o patrón de referencia?
Si todo esto está por fuera de la formación curricular que el Estado reconoce, ¿Cómo un Decreto concede un aval trucho para el ejercicio de disciplinas sin comprobación científica, con título profesional?
¿Cómo argumentamos de una manera sencilla a una persona que desconoce la pirámide de la evidencia que es una anomalía casi delictiva que un veterinario afirme que mejorará su perro que tiene una enfermedad neoplásica con terapia infinitesimal, si el propio Reglamento lo avala?
Aquí hay una recopilación de bibliografía sobre la Energía Piramidal para los que contestarán que son las citas bibliográficas.
17 citas: aquí
Aquí otra muestra del delirio: Hannemann, Kent, Nash, Allen, Vithoulkas, todos estos autores escriben de homeopatía prescripta para humanos; luego viene un veterinario con imaginación y cree ver en un perro o gato los síntomas que estos señores describieron para personas y entonces hacen una extrapolación, una traslación inter especie jamás demostrada y además con la más absoluta ausencia de pruebas que funcione para la primera o para la segunda.
Este mismo procedimiento es el que un veterinario usa para cualquier terapia alternativa, si él cree que funciona en el humano lo aplica luego a quien le da la gana, entonces no puede verse estas extravagancias como ajenas a nuestra profesión, porque son las mismas instituciones quienes las promueven y apoyan y ponemos a la homeopatía como ejemplo pero las terapias alternativas, son muchísimas y cada año aparece una nueva o una vieja reciclada.
La homeopatía es en realidad una de las que el ítem 16 menciona en primer lugar, una disciplina que lleva 200 años de existencia y recién hoy, luego de dos siglos, los veterinarios que la practican se percatan que tienen que tratar de reunir una evidencia que sea algo más que testimonial para su apoyo y fe y el grupo que la difunde lo demostrará algún día remoto aquí en Uruguay.
Repito que hay un Código de Ética que en estas condiciones podría decirse que resulta inaplicable, pero podemos estar tranquilos, el honor y la dignidad de la profesión está en buenas manos, el Colegio se encarga.
Un año de torpe silencio cómplice, burocrático y muy lejos de la Ciencia.
Aquí un repaso sobre la Pirámide de la Evidencia y su ocultamiento o destrucción cuando se aplica el ítem en cuestión.
Reclamo la atención que el asunto merece por las implicancias que para la opinión pública significa nuestra responsabilidad como profesión. Si las autoridades del Colegio creen en estas cosas es su problema, pero este ítem debe ser eliminado, piénsenlo como medida de protección social.
La gente piensa, si hasta los veterinarios lo aplican entonces no es un placebo, tengo un vecino que su tía tiene un gato y ella lo usó y le funcionó.
Sirva éste artículo como una especie de índice incompleto de algunas de las terapias alternativas que he mencionado (complementarias como les gusta decir a quienes las practican) y que hemos analizado.
Digo incompleto porque seguiremos agregando ejemplos, el Colegio las promueve a todas, somos ahora sus supervisores, brillante idea que pulveriza y aniquila toda racionalidad científica. Por eso el título de la nota: El velorio de la Razón.
Adenda:
Aquí hay una joya, una homeópata( Dra. Sagi) explica como ella hace el diagnóstico con la foto del paciente que se encuentra en otra ciudad o continente aplicando el método del Péndulo, prepara su mente uniendo los dos hemisferios, explica su técnica y relata que debe hacerlo por un período de 20 minutos antes de la consulta.
Remote healing: Curación remota.
Técnica explicada de los 20 minutos de sincronización de hemisferios cerebrales, previa al proceso, ver desde 22.00 a 25.30.
Aclaramos que no puede dudarse de su disciplina porque es una candidata de la Academia de Ciencias de Hungría y la presenta y apoya otro integrante de dicha Academia que además es postulante para el Premio Nobel de la Paz, ha publicado muchos libros (la bibliografía imprescindible), declara que ella rescata una terapia ancestral, que hace una profusa individualización del paciente (consulta personalizada) y usa una variedad de técnicas que aplica según cada caso lo que pone de manifiesto su amplitud mental y gran versatilidad.
La comprobación de la eficacia de sus prácticas se encuentra además firmemente demostrada por los casos que relata (testimonio propio y de quien le acompaña y apadrina) y eso ya alcanza.
O sea, esta charla que pueden traducirla al español con la ruedita de ajustes, merece tenerse en cuenta y detallo a continuación las técnicas que aplica:
1. Homeopatía clásica.
2. Nueva Homeopatía de Korbler o terapia de agua informada. ( Es llamativa la intrusión de los ingenieros en la salud. Korbler fue ingeniero eléctrico y Vithoulkas también era ingeniero pero con un curso en la India se hizo homeópata.)
3. Terapia de Chakras o alineación de los mismos.
4. Sanación con cristales.
Este señor Ervin Laszlo, a quien dedicamos un artículo completo, también estudia la telepatía y ha encontrado según relata en las entrevistas que referimos y que deben escucharse, las razones que explican los poderes paranormales y la homeopatía que él lucha para elevarla a la categoría de Ciencia.
Registros Akáshicos, El Sr. Laszlo es uno de los mayores promotores de esta idea.
Telepatía animal o comunicación con los animales.
Iridología para el diagnóstico homeopático.
Homeopatía y uso del Dióxido de Cloro en perros y gatos para los casos en los que la primera disciplina falla (los casos difíciles para un homeópata los trata con este producto). Ver aquí, minuto 46:38, Dióxido de Cloro o el MMS. Notable conferencia de una colega.
Los consejos del Dr. Kent, homeópata referencial.
Terapia con agua informada para animales.
La prensa a veces necesita llenar huecos de espacio o tiempo con noticias insólitas y ridículas que llaman la atención.
La solución del Padre Aguilera: aquí
Da la impresión que el CVU del espera cómoda y pasivamente que esto ocurra algún día con el ítem que cuestionamos.
Homeopatía en la India: aquí, interesante información.
Por si no se lo tiene en cuenta, la India ha creado un ministerio de terapias alternativas (AYUSH, 2014) que sirve como válvula de escape para que ingenuos, desinformados o convencidos alineados, utilicen estas vías de sanación de costo cero en lugar de saturar y detonar un sistema de salud real de MBE que solo está disponible para las castas que pueden pagarlo.
Con todos los ejemplos que hemos expuesto se puede afirmar que establecer el pensamiento mágico como base de las prescripciones de un profesional como potestad exclusiva, parece un primer paso institucional para una medicina de parias e ignorantes y esto es un hecho tremendamente pernicioso para la profesión.
No veo más opciones que dos. Seguir en actitud de inacción contemplativa en este tema y esperar a que el asunto nos explote en la cara o reconocer el error (cualquiera se puede equivocar) e iniciar los caminos administrativos y legislativos para la eliminación de este ítem del Reglamento, el Colegio tiene un abogado para estos asuntos, sólo se necesita la voluntad de hacerlo.
Aunque el CVU podría excusarse de que la homeopatía está en debate en el mundo (?) y que es «controversial» para ser amigable y correcto con quienes la practican y esperar una conclusión de la Academia, la misma Academia no puede formar una comisión para el debate de testimonios para cada pseudociencia que existe o existirá; el ítem 16 es groseramente genérico, dice textualmente «las terapias alternativas» englobándolas a todas y este es el sentido de advertencia de este artículo que expone la vergüenza de que se nos equipare con un Decreto a curanderos y charlatanes.
No es este el lugar al que el Colegio de profesionales debería llevarnos, con el agravante de que además la colegiatura por Ley es obligatoria.
«__Es una ciencia -replicó Don Quijote- que encierra en sí todas o las más ciencias del mundo,…»
Miguel de Cervantes Saavedra.
Segunda parte, capitulo XVIII.
Dr. Pablo Butler
Actualizado, diciembre 2025
Artículo en construcción
Aclaración: el punto de vista aquí expuesto es la opinión exclusiva de quien firma al final de esta nota y no necesariamente refleja la opinión de los otros integrantes del equipo, aunque puedan compartir parte de lo que aquí se desarrolla o nada de todo esto, pero sí comparten la defensa de las mejores prácticas de la verdadera medicina veterinaria.
Si luego de terminar este artículo le queda alguna duda sobre el tema, puede leer como complemento la siguiente publicación y entenderá de manera clara la indignación frente al fraude de las terapias alternativas.
No se puede ser tan descarado e insolente con las ciencias. Como un caballo de Troya alguien metió este disparate en el reglamento y debe ser extirpado antes de que cause un incendio de vergüenza en la opinión pública.
Explicaremos de qué se trata. Es una revisión a manera de resumen de no sólo uno, sino tres homeópatas que hacen acerca de un remedio homeopático, describiendo las características de la mujer y el hombre que lo necesitan, el Platinum. Luego se transfiere el sentido según el intérprete a como le dé la gana su aplicación en animales.
Platinum: lea aquí
No hay manera de tratar a las mujeres con más prejuicio, desprecio y humillación verbal que lo que se encuentra en algunos pasajes de esta publicación. No deje de leerlo.
Enumeraré a los 15 homeópatas citados como referentes de la misma y más que enojarnos con ellos, deberíamos tomarlo con humor, aunque luego veamos estos personajes citados por los que éstas disciplinas practican. Se trata de bibliografía específica de la materia.
Allen TF, Boericke W, Clarke JH, Demarque, Jouanny y Poitevin B. et al., Duprat H, Gallavardín, el mismo Samuel Hahnemann, Hering C, Dr. James Tyler Kent , Lathoud JA, Morales Prado E, Phatak SR. y Vijnovsky B.
Al final se presenta un caso clínico que ejemplifica cómo resuelven tres homeópatas un caso. Una verdadera maravilla. Insisto en que lo lea.
«Las experiencias de Platinum representan la mente viciada de la mujer». J.T. Kent.
Es muy curioso que dos de los tres autores del mismo (todos ellos son médicos homeópatas de Sevilla, España) son mujeres: María Luisa Ray Guerreiro y María de los Ángeles Rodríguez Cejas. (Se le llama «sororidad»).
En esta época de pensamiento y declarativas de demarcación correcta y de universidades con oficinas de género, estos materiales deberían denunciarse por discriminadores y misóginos porque no tratan nada bien a la mujer.
Estudie Platina y lo comprobará. El artículo fue elaborado por el Instituto Médico de Estudios Hahnemannianos de Sevilla. Una Joya.
Podríamos preguntarnos para terminar, ¿Cómo hace luego un veterinario que se percibe homeópata para traducir esto en la salud real de un perro, de una yegua o de una chancha enferma? No lo sabemos pero todo lo convalida el ítem 16 de nuestro reglamento como profesionales colegiados. La dignidad y el honor de la profesión están a salvo.